Normativa RAEE

La Directiva sobre Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) ya es ley en el Reino Unido. La legislación pretende que los productores paguen por la recogida, el tratamiento y la recuperación de los residuos de aparatos eléctricos. La normativa también implica que los proveedores de aparatos, como las tiendas de barrio y los minoristas de Internet, deben permitir a los consumidores devolver gratuitamente sus aparatos usados.

La cantidad de RAEE que tiramos aumenta en torno al 5% cada año, lo que la convierte en el flujo de residuos de más rápido crecimiento en el Reino Unido.

Gran parte de los RAEE del Reino Unido acaban en vertederos, donde el plomo y otras toxinas que contienen pueden contaminar el suelo y el agua. Esto puede tener un efecto perjudicial para el hábitat natural, la fauna y también para la salud humana.

Muchos aparatos eléctricos que tiramos pueden repararse o reciclarse. Reciclar artículos ayuda a ahorrar nuestros recursos naturales finitos y también reduce los riesgos medioambientales y sanitarios asociados al envío de aparatos eléctricos al vertedero.

Los distribuidores de nuevos aparatos eléctricos y electrónicos (AEE) tienen un papel que desempeñar en la reducción de la cantidad de RAEE que van a parar a los vertederos.

Genvolt está obligada por esta normativa a ofrecer a nuestros clientes la recogida gratuita de sus RAEE en condiciones de igualdad cuando nos compren un nuevo producto eléctrico o electrónico.

Por ejemplo, si un cliente nos comprara una nueva fuente de alimentación de alta tensión, aceptaríamos su antigua fuente de alimentación de alta tensión y evitaríamos que fuera a parar a un vertedero eliminándola de forma segura. Los clientes deben devolvernos su artículo RAEE en un plazo de 28 días desde la compra del nuevo artículo.

Según la normativa RAEE, todos los aparatos eléctricos nuevos deben ir marcados con el símbolo del cubo de basura tachado que se muestra a continuación:

Las mercancías están marcadas con este símbolo para indicar que han sido producidas después del 13 de agosto de 2005, y deben eliminarse por separado de los residuos domésticos normales para que puedan reciclarse.